CONSEJOS PARA ESCRITORES NOVELES

ALGUNOS CONSEJOS DE FORMA

  1. Elimina palabras innecesarias. Las palabras “ligeras” que no te llevan a ninguna parte. Como dijo Mark Twain: “Escribe maldito cada vez que estés dispuesto a escribir muy; el editor lo eliminará y la escritura será como debe ser”.  
  1. Evita la repetición de conectores. Sin embargoes deciren cuanto queesto es
  1. La puntuación es fundamental, marca el ritmo del texto. Asegúrate de usarla bien. El punto y coma existe. Y los dos puntos. Y las comas a veces no se utilizan como crees que deben utilizarse.
  1. Ojo con la concordancia. De número y género. Para dudas, la RAE es tu amiga. Las veces hará de ese colega de trabajo que está en las mismas que tú y que te ayuda a aclarar las dudas.
  1. En general, debes estudiar y conocer tu herramienta principal de trabajo, que es el lenguaje. Aprende ortografía, aprende gramática, aprende sintaxis, aprende retórica. Toda la que puedas.
  1. No te pases con los gerundios; no te pases con los adverbios terminados en –mente. Enlentecen y abigarran el texto.
  1. No te pases con las subordinadas. Y no las hagas demasiado largas, ni metas quea tutiplén.
  1. No te pases con los adjetivos. Si analizas tus textos, te darás cuenta de la gran cantidad de adjetivos que has usado que en realidad no aportan gran cosa.
  1. En los diálogos, no te limites a identificar al hablante mediante el verbo de habla. Puedes meter incisos con lo que están haciendo, pequeñas descripciones sobre su indumentaria, etc. No tengas miedo de experimentar. Solo tienes que leer los diálogos luego en voz alta para ver si suenan bien.
  1. Y evita los verbos de habla que no sean básicos (decir, preguntar). Que en cada intervención haya verbos como barbotar, especificar, inquirir, acusar… desconcentra al lector y le resta naturalidad a la comunicación entre tus personajes.
  1. No utilices palabras rimbombantes. Como dijo Franzen: “los verbos interesantes rara vez son interesantes”. En resumen,
  1. Haz que suene natural. Como dijo Elmore Leonard: “Si al leerlo suena a algo escrito, reescríbelo”.
  1. Como ya hemos dicho con los diálogos, lee en voz alta tu texto. Así comprobarás si suena natural, entenderás mejor el ritmo de lo escrito. Y evitarás las rimas internas, para que tu escritura fluya de manera creíble y no se te cuelen pareados terribles (y otras cosas que riman con creíble).
  1. Recorta sin piedad. En tu texto y en tu vida, para hacerle sitio a la buena escritura. Ya lo decía Susan Sontag: “Hay mucho que hay que entregar o que te quitarán si quieres escribir una obra”.
  2. Evita la decoración innecesaria. Lo dijo Hemingway: “La prosa es arquitectura, no decoración de interiores”. Una buena forma de conseguirlo es la siguiente:
  1. Relee tu frase y elimina todas las palabras que no aporten nada. Las que no sean necesarias. Como decía Vonnegut, todos los párrafos deben decirnos algo sobre el personaje o sobre lo que está ocurriendo. Lo demás acaba siendo accesorio.
  1. No cuentes, muestra. Chéjov dijo: “No me digas que brilla la luna; muéstrame un destello de luz sobre cristales rotos”.
  1. Como decía Orwell, nunca uses una metáfora o expresión que estés acostumbrado a ver impreso. En definitiva, no uses expresiones socorridas y habituales. También dice:
  1. Nunca uses la voz pasiva si puedes usar la activa. Esto le proporciona mayor fluidez y sencillez al texto.
  1. Si surgen dudas, normalmente el orden lógico de la oración resulta ser el más eficiente (sujeto + verbo + predicado). Y para los adjetivos también (¡no los pongas siempre delante del sustantivo!).
  1. En general, utiliza palabras cortas, frases cortas y párrafos cortos. Así, cuando metas una palabra larga, una frase larga o un párrafo largo, será extraordinario y recibirá la atención que merece. Intenta utilizar tiempos verbales simples. Un “ella llegó” suele quedar mejor que un “ella había llegado”.
  1. Utiliza la palabra precisa. ¿Por qué decir “atravesó el umbral de la puerta para entrar en la habitación” (sic) cuando puedes decir “cruzó la puerta” o incluso “entró”? Si hay una sola palabra que puede sustituir a tres palabras, suele ser la palabra adecuada. Para esto es útil…
  1. Aprender palabras nuevas. Visita el diccionario de vez en cuando. A mí me gusta utilizar generadores aleatorios de palabras, aunque todavía no he encontrado uno en español que me convenza del todo.
  1. Elimina unos cuantos signos de exclamación. Decía Scott Fitzgerald que los signos de exclamación eran como reírte de tus propios chistes. Y queda mucho mejor en un diálogo que nos demos cuenta de la desazón de un personaje por su lenguaje corporal que por esos ocho signos de exclamación que toman al lector por tonto.
  1. Aprende a utilizar los puntos suspensivos. No, no sirven para todo.
  1. No abuses de la metáfora. Ni de los símiles. Que destaquen porque son escasos en un texto sencillo. Que destaquen porque tienen sentido (¡coherencia!), no solo porque suenen bien, y porque nadie los ha usado antes.
  1. No solo percibimos con la vista. También con el oído, el tacto, el olfato… Usa estos sentidos en tu escritura, pero por favor no los uses siempre, ni todos a la vez.
  1. Utiliza el lenguaje adecuado para tu público. Los tecnicismos, por ejemplo, no son ideales si no estás escribiendo para un público especializado.
  1. Piensa en cómo sobrevivirá tu lenguaje al paso del tiempo. Utilizar palabras coloquiales actuales puede ayudarte a darle realismo a un diálogo, pero también puede hacer que tu texto se quede obsoleto en muy poco tiempo. Del mismo modo, no siempre es conveniente referirse a temas exclusivos de la actualidad o a memes efímeros.
  1. Un consejo de corrección: ten cuidado con ciertas palabras que el procesador de textos no te va a identificar como errores.
Compartir
Facebook
0
Would love your thoughts, please comment.x
()
x